La gorda de mi madre estaba muy borracha

Esa noche mi madre estaba muy borracha, había salido como otras tantas noches y cuando volvió se quedó dormida en la cama. Yo fui y comencé a tocarla, puse una almohada en su cabeza para que no se la viera y lo grabé todo. Toqué sus tetas, su barriga, sus piernas… estaba gorda, pero a mi me gustaba eso. Saqué mi polla con la idea de pajearme. Bajé sus braguitas para ver su coño y continué, hasta que no pude controlarme más y quise follármela. Empecé a restregar mi verga y se la metí un poco en su coño con cuidado, no tardé nada en correrme y se lo eché encima, que cachondo me puso.